Entendiendo el Costo de Oportunidad: El valor de tus decisiones [+Reel]
Guía completa de "Costo de Oportunidad" para aprender a tomar decisiones más informadas que mejoren nuestra salud económica.
El mundo de las finanzas personales es complejo, pero comprender conceptos fundamentales, como el costo de oportunidad, puede brindarnos una guía invaluable para tomar decisiones más informadas y mejorar nuestra salud económica. Hoy, te acercamos este concepto esencial que subyace en cada elección que realizamos en nuestras vidas.
¿Qué es el Costo de Oportunidad?
El costo de oportunidad es el valor de aquello a lo que renunciamos al elegir una opción sobre otra. En esencia, representa el valor de la mejor alternativa que sacrificamos al tomar una decisión específica. Este concepto no se limita únicamente al ámbito económico, sino que se extiende a todas las áreas de la vida donde nuestras decisiones implican elegir entre diferentes opciones.
El cálculo del costo de oportunidad es relativamente simple: al valor de la opción NO elegida le restamos el valor de la opción elegida.
Si el resultado es positivo, significa que la opción elegida no fue la óptima, ya que la alternativa no elegida tenía un mayor valor. Esto es lo que conocemos como dejar pasar una gran oportunidad.
Por otro lado, un resultado negativo indica que se tomó la mejor decisión y entonces, podríamos decir que salimos ganando.
Si el resultado es nulo (igual a cero) ambas opciones resultan iguales, y por lo tanto estamos indiferentes entre elegir una o la otra, es decir, no hay costo de oportunidad.
Entonces… ¡Menos es más! Al tratarse del beneficio no elegido, o el valor de la oportunidad que dejamos escapar, cuanto menor sea, mejor será la decisión que has adoptado ya que menor es lo que estamos perdiendo.
Acá te dejamos un reel que puede servirte si no te quedó del todo claro:
Aplicaciones prácticas del Costo de Oportunidad
En nuestro día a día, continuamente nos encontramos tomando decisiones. Cada elección que tomamos conlleva un conjunto de alternativas entre las cuales debemos decidir. Por lo tanto, es crucial estudiar detenidamente nuestras opciones y evaluar las ganancias y pérdidas asociadas con cada una.
En la gestión de nuestras finanzas personales, el costo de oportunidad adquiere especial relevancia. Nos ayuda a identificar gastos prescindibles, o no necesarios, y a redirigir nuestros recursos hacia opciones más rentables y productivas.
Pero… ¿Cómo aplico este concepto a decisiones diarias?
Supongamos que este mes destinas $100.000 en tu caja de ahorro al pago de una deuda que vence en 60 días. Vos que ya estas canchero en finanzas y sos conocedor del costo de oportunidad 😎 vas a analizar tus opciones disponibles:
- Opción 1: dejar estos pesos inactivos en tu cuenta bancaria, asegurándote una liquidez inmediata.
- Opción 2: invertir estos pesos en un fondo común de inversión de bajo riesgo, ganando una rentabilidad del 6% mensual, en donde luego de dos meses tu capital final será de: $112.360.
En este caso es casi evidente que la opción 2 es la ganadora, pues nos permite no solo pagar la deuda, sino también generar intereses, este es un ejemplo muy sencillo porque estamos considerando que la deuda esta fija en pesos, y no evaluamos el impacto de la inflación.
Entonces, el costo de oportunidad será:
100.000 (opción NO elegida) -112.360 (opción elegida)= -12.360 (costo de oportunidad)
Como el resultado es negativo, sabemos que estamos eligiendo la opción ganadora.
Algo aquí a tener en cuenta, es que hay aspectos que muchas veces son difíciles de cuantificar o de medir, por ejemplo, alguien que es MUY miedoso y elige la opción 1 tendrá como costo de oportunidad los $12.360 que se pierde de los intereses, pero ganará en paz mental, sabiendo que sus pesos están las 24 horas de los 7 días de la semana disponibles en su cuenta de banco.
Algo similar pasa con el rendimiento y el riesgo de los instrumentos financieros, cuando nosotros elegimos carteras de bajo riesgo estamos ganando en tranquilidad, pues el riesgo es bajo, pero estamos perdiendo en rentabilidad; esto lo que nos demuestra es que cada decisión financiera es singular y el costo de oportunidad es solo una herramienta más a considerar.
Otro clarísimo ejemplo es la compra de dólares; si bien esta compra nos hace sentir seguros porque estamos ahorrando en una moneda que es fuerte, puede que NO sea nuestra mejor opción, pues nos estamos perdiendo de los intereses que ese dinero invertido podría darnos. También deberíamos tener en cuenta que en EEUU existe inflación (baja en comparación a la de Argentina, pero inflación al fin), lo que significa que esos dólares billetes pueden llegar a sufrir una pérdida de poder adquisitivo.
Visto de otro modo, el costo de oportunidad de tener dólares bajo el colchón es la rentabilidad que nos perdemos por no elegir invertir esos dólares (o sea, el costo de oportunidad está dado por no elegir carteras dolarizadas, que no solo nos brindan cierta tranquilidad al estar dolarizadas, sino también rentabilidad al estar invertidas).
Entonces, a la hora de calcular el costo de oportunidad de tener dinero en nuestra cuenta bancaria por un período de tiempo determinado, tené en cuenta que implicará que no solo estamos renunciando a cierta capacidad de compra ( ya que cuando decidas gastar este dinero, te alcanzará para comprar menos) sino también a los intereses que este dinero podría generarnos de invertirse.
Ventajas del Costo de Oportunidad
- Permite evaluar el valor de una opción en relación con otras alternativas, lo que posibilita la toma de decisiones informadas y fundamentadas.
- Facilita la selección de opciones más beneficiosas y rentables.
- Ayuda a establecer prioridades, fomentando la planificación a largo plazo y la gestión eficiente de los recursos.
- Permite evaluar el impacto de las decisiones en el futuro, identificando y evitando riesgos innecesarios.
- Promueve la búsqueda de alternativas más rentables y eficientes.
LLEVATE ESTA IDEA
El costo de oportunidad es crucial en la toma de decisiones financieras y puede ayudarte a mejorar tu salud económica a largo plazo. Al considerarlo en tus decisiones, podes tomar medidas para optimizar tus ingresos, reducir tus gastos y construir un futuro financiero sólido.
¡Recorda que cada decisión tiene un costo de oportunidad, así que elegí sabiamente!