¿Por qué invertir a largo plazo?

Invertir a largo plazo es la forma más segura de ganar dinero, y te contamos por qué.

En las palabras de Warren Buffet, el mejor inversor de todos los tiempos, el mejor plazo de inversión es “para siempre”.

Seguramente pienses que invertir es para oportunistas, que buscan entradas y salidas rápidas en busca de una “oportunidad” casi inmediata. Lo que no estas viendo es que los mayores beneficios se dan en el largo plazo, ya que eso nos permite invertir en activos de mayor riesgo y con la potencialidad de dar retornos extraordinarios.

Pensar que hacer un plazo fijo o comprar dólares para atrincherarlos abajo del colchón es la única estrategia de inversión que sirve nos mantendrá lejos de multiplicar nuestro dinero. Estas dos inversiones tradicionales, con suerte, pueden llegar a empatarle a la inflación.

Como en todo, el plazo al cual tomamos una decisión siempre es importante. No es lo mismo guardar dinero para pagar las tarjetas de crédito a fin de mes, ahorrar para cambiar el auto en 6 meses, o invertir para nuestro futuro retiro.

Lo bueno es que el mercado tiene alternativas de todo tipo, y hay algunas especialmente diseñadas para generar grandes retornos a lo largo del tiempo, y así ayudarnos a alcanzar la tan ansiosa y aclamada libertad financiera. Por eso el plazo es tan importante.

Beneficios de invertir a largo plazo

Mantener una inversión a largo plazo ayuda a bajar la ansiedad y disminuye los errores no forzados. Mientras más locos nos ponemos, y más inteligentes creemos que somos, más errores cometemos. Nuestro mayor enemigo somos nosotros mismos.

Muchos inversores pasan horas y horas intentando adivinar el mejor precio de compra y el momento justo para vender, y lamentablemente son solo un puñado en el mundo los ‘traders’ que logran generar retornos superiores al promedio de mercado, o, mejor dicho, el retorno de los inversores que compraron y simplemente esperaron sin hacer nada.

Invertir tiene que ser aburrido. Si te estas divirtiendo, probablemente estés haciendo mal las cosas, y el único que este ganando dinero sea tu broker cobrándote comisiones por cada compra y venta recurrente.

Por supuesto, esto requiere cierto nivel de paciencia y convicción, pero ofrece grandes recompensas. Entre sus ventajas, este estilo de inversión puede multiplicar tus ahorros a través de la magia del interés compuesto.

¿Qué es el interés compuesto?

El interés compuesto quiere decir que cada año acumulamos el interés o ganancias para que el próximo año formen parte de nuestra inversión principal, así en el siguiente año, el capital invertido estará compuesto por el monto inicial más el rendimiento del año anterior.

Veamos un ejemplo:

$1000 dólares invertidos al 20% anual durante 20 años.

Como ves, el primer año de tu inversión generó $200 de intereses. Por lo cual, el año siguiente estarías arrancando con $1200, y de esa forma generarías al final de ese ciclo $240 (en vez de $200).

Siguiendo este ejemplo, el tercer año generarías $288, y ya para el año 10 estarías generando $1031 de ganancias, más que el capital con el cual arrancaste.

Esto te permitirá generar retornos extraordinarios en el largo plazo. Si en vez de reinvertir las ganancias, las retiraras, en 20 años tendrías $5000 ($1000 + $200 x 20 años). Pero como reinvertiste las utilidades, el capital al final de 20 años fue de $38.337. ¡Multiplicaste tu capital 38 veces!

¿Ves la diferencia?